Una buena idea es es terminar es terminar la ducha diaria aplicando agua fría sobre tus senos para estimular la microcirculación sanguínea y reafirmar la piel. Hazlo con movimientos de rotación desde fuera hacia dentro, sin acercar el teléfono de la ducha demasiado al pecho, ya que la presión del agua podría romper sus fibras. También se pueden aplicar un tónico reafirmante que uno mismo puede preparar realizando una infusión de tomillo y romero a partes iguales. Dejar que se enfríe, filtrar y aplicarlo sobre los senos, retirándolo a los 10 minutos. Hazlo dos o tres veces por semana. Además, hidratarlos a diario después de la ducha con una crema especifica para senos o bien con aceites como el de aguacate, argán o jojoba.
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